La política

Entiendo que existen innumerables causas para participar de la política diariamente y desde la posición de la sociedad en la que uno se encuentre. No desde un partido, sino desde las propias observaciones y convicciones.

Los fanatismos no sirven de nada ya que a la hora de presentar una idea de país, absolutamente nadie tiene toda la razón ni todos los aspectos de la realidad cubiertos. En tal sentido es lógico que los ciudadanos disentamos con algunas ideas y estemos de acuerdo con otras.

Si esto no fuera así ¿en que clase de democracia estaríamos?

En un principio y sin caer en pensar en las debilidades humanas sobre sus peores pensamientos que son la avaricia y la envidia, todos los ciudadanos de una nación pretendemos lo mismo, una sociedad organizada y eficiente que cumpla con todas las necesidades que tienen sus integrantes. Seguridad, educación, salud, igualdad de oportunidades (no dádivas eternas que compensen la falta de voluntad de algunos con el trabajo de otros sino ayudemos a estos a encontrar un empleo y que se haga responsable en mantenerlo), trabajo, progreso, desarrollo tecnológico propio, unidad, valores.

Por otro lado el estado debe esforzarse en volverse cada día más eficiente y para ello debe contar con la estructura justa que le permita cumplir con las obligaciones de éste para con sus ciudadanos. Esto está claramente visto, cuando el estado está sobre-dimensionado nunca tiene recursos suficientes y el trabajo se diluye.

Se debe capacitar y preparar intensivamente a los ciudadanos para que se transformen en verdaderos empresarios que dirijan sus propias empresas y piensen por sí mismos sin necesidad de la tutela del estado. Ésto último produce dependencia del gobierno de turno, sobre lo cual se deben separar perfectamente las aguas ya que no es cuestión de agarrar la manija, están ahí para hacerse responsable del porvenir de toda una nación y no pueden manejar su continuidad obligando a los cautivos empleados.